Autor: Dr Chill

El estrés es una condición de carácter psicológica que nuestro cuerpo va adoptando durante nuestro desarrollo, mismo que desencadena diversos efectos secundarios sobre el funcionamiento de nuestro cuerpo. Cuando nosotros estamos estresados nuestro cuerpo comienza a segregar una hormona que está completamente relacionada con este mismo estrés, esta hormona lleva por nombre cortisol. Cuando nuestro cuerpo tiene un nivel elevado de cortisol nuestro cuerpo comienza a interferir con nuestra capacidad de aprendizaje, la memoria, la función inmunitaria comienza a disminuir, así como la densidad ósea.

El alto nivel de cortisol también repercute en el aumento la presión arterial, el colesterol y con ello las enfermedades cardiacas.

Además, aumentan el riesgo de padecer depresión, enfermedades mentales y en las mujeres principalmente reduce la esperanza de vida en mayor cantidad.

Cuando decimos que las mujeres tienden a padecer más este tipo de problemáticas es, principalmente, por el ritmo de vida que estas presentan, así como las actividades que realizan de manera cotidiana debido a sus roles en la sociedad.

De manera general, se concluye que, en las problemáticas como la falta de dinero, falta de tiempo, exceso de tareas, etc. Debido a las actividades domésticas y el estrés que involucra realizar esas actividades, así como las hormonas que participan en el desarrollo de su organismo en los cambios premenstruales, posparto y menopausia serán aquellos que van a poder afectar la vulnerabilidad emocional y la depresión.

¿Qué es el cortisol?

El cortisol es una hormona que se produce a partir del colesterol, especialmente en la parte superior de nuestros riñones.

Esta se libera como respuesta de diversos eventos que vivimos y circunstancias en nuestra vida diaria, ya sea por actividades que requieran de mucho esfuerzo, suele presentarse mayormente por el estrés agudo.

El cortisol interviene en el metabolismo de nuestra glucosa. Los niveles normales de cortisol tienden a aumentar la energía, el metabolismo y ayudan a regular la presión arterial.

 ¿Cuáles son los efectos del estrés y cortisol en la salud?

Cuando segregamos el cortisol en niveles muy altos, es decir, cuando existe un estrés crónico y desmedido, esta hormona suele tener afecciones a nuestra salud.

Sin embargo, esta hormona tiene una diversidad de funcionalidades en nuestro cuerpo cuando se presenta de manera óptima, con niveles adecuados y bien tolerados por nuestro organismo, tales repercusiones son:

• Respuesta de nuestro metabolismo: Cuando ayunamos, el cortisol estimula una ruta en nuestro metabolismo que ayuda a cubrir las necesidades corporales de glucosa, llamada gluconeogénesis, activando las vías antiestrés y antiinflamatorias.

Cuando los niveles de cortisol son elevados y prolongados, pueden causar la descomposición de las proteínas. Esto lleva a un desgaste de nuestros músculos.

• Respuesta de nuestro sistema inmunológico: Cuando el cortisol está en nuestro cuerpo en niveles normales, evitará la liberación de ciertas sustancias que causan inflamación celular.

¿Cómo podemos regular nuestros niveles de cortisol?

En primera instancia, las primeras recomendaciones que se tienen para moderar o regular los efectos del cortisol en nuestro cuerpo causados por el estrés. Se encuentran:

1. Cambio de nuestra dieta por alimentos integrales, así como la suplementación para la regulación de los niveles del estrés, así como antiinflamatorios.

La implicación de la alimentación es fundamental para un proceso tipo detox, ya que, mediante la ingesta de los suplementos o alimentos antiinflamatorios y antioxidantes, fibras, nutrientes esenciales, etc., serás los responsables de poner en buen camino nuestro equilibrio fisiológico cuando estamos estresados, además contribuirá a las funciones suprarrenales, lo cual tendrá repercusión en mantener el peso de nuestro cuerpo saludable.

• Controlar y reducir el estrés mediante la práctica de actividades recreativas y funcionales, así como la práctica de terapias que induzcan a la relajación:
• Meditación
• Ejercicios de respiración profunda
• Tener contacto con la naturaleza
• Realizar actividad física
• Además de mantener una correcta suplementación para mejorar los efectos secundarios del estrés. Dr. Tao es una excelente alternativa que te ayudará a mejorar los efectos del estrés y cortisol que involucran el aumento de peso.

Nuestro cuerpo está expuesto a una gran cantidad de actividades que nos provocan estrés. Inducen un descontrol hormonal dentro de nuestro organismo, afectando diversos procesos que realizan nuestros sistemas. El estrés y la secreción de nuestras hormonas relacionadas con dicha respuesta está controlada por una parte de nuestro cerebro llamado hipotálamo.

El hipotálamo actúa como una torre de control, este mismo decide enviar ordenes a nuestras hormonas del estrés y comenzar a activar ciertas actividades como consecuencia. Estas hormonas que se van a segregar van a responder a manera “lucha o huida”. Van a provocar un estímulo a diversos órganos y funciones, el corazón y la respiración. Se van a acelerar y nuestros músculos se prepararán para activarse.

Este mecanismo de acción de nuestro cuerpo no es malo, es simplemente una respuesta que actúa como si fuera un botón de emergencia que actúa rápidamente pero que si se activa día con día puede repercutir en nuestra salud y provocar una grave afectación. Es importante ir con un especialista para tratar este problema.

¿Qué otros hábitos mejoran el nivel de estrés en el cuerpo?

Aparte de tomar hábitos que ayuden a mejorar nuestra salud, tales como realizar algún deporte, practica de mindfullnes y tener una buena suplementación que contrarreste los efectos del estrés, tales suplementos como la melatonina, cúrcuma liposomal, entre otras que nos enriquecen con sus potenciales antioxidantes y nos llenan de energía, tal como lo hacen los suplementos de Dr. Tao.

El estrés es una reacción de nuestro cuerpo y mente que sucede de manera natural, este es provocado por actividades de nuestra vida cotidiana, es imposible no presentar estrés con el ritmo de vida que tenemos, el trabajo, la escuela, los pendientes e incluso llegar tarde a una cita puede provocarnos este tipo de respuestas.

Entre las diversas consecuencias que lleva el presentar el estrés de manera crónica incluyen los siguientes síntomas:

Irritabilidad, depresión, ansiedad, insomnio y dolores de cabeza.

¿Cómo nos afecta el estrés en el cuerpo?

Como mencionábamos anteriormente, cuando presentamos el estrés de manera crónica. De manera consecutiva en un gran lapso de tiempo puede afectar a una gran diversidad de órganos y sistemas, entre las diversas afecciones se encuentran:

Sistema inmunitario

Cuando hay estrés en el cuerpo, este va a estimular a nuestro sistema inmunológico, lo que puede ser una gran ventaja para nuestro cuerpo ya que este responde de manera inmediata, ayudando a evitar las infecciones y a curar heridas en caso de presentarlas. Esto solo funciona cuando el estrés es leve y momentáneo, pero una vez que se hace más consecuente nuestras defensas van a debilitarse y reducir las respuestas de las células. Una vez que se debilita nuestro organismo, seremos más susceptibles a contraer enfermedades virales como gripe y resfriado, así como otras infecciones. El estrés podrá aumentar el tiempo que tardas en recuperarte de una enfermedad.

Sistema nervioso central y endocrino

El mecanismo de “lucha y huida” será llevado a cabo por nuestro sistema nervioso central (SNC). En dicho sistema se encuentra el hipotálamo, que pone en marcha la liberación de las hormonas que surgen a partir del estrés, estas sol la adrenalina y el cortisol. Estas dos hormonas van a hacer que nuestro corazón lata más fuerte, bombeando más sangre a las zonas que necesitan recuperación por el estrés, tales son los músculos, el mismo corazón, entre otros órganos involucrados.

Sistema respiratorio y cardiovascular

Durante la respuesta del estrés las hormonas adrenalina y cortisol provocarán que los ritmos de respiración se eleven. Nuestro sistema respiratorio se verá sujeto a un esfuerzo máximo provocando que a las personas que padecen algún tipo de enfermedad respiratoria caigan en una mayor dificultad.

En estas situaciones nuestro corazón también hará un esfuerzo y bombeará más rápido, la adrenalina y el cortisol van a provocar que los vasos sanguíneos se contraigan y desvíen más oxígeno a los músculos para que al actuar tengan más fuerza, sin embargo, es una actividad que aumenta la presión arterial.

Sistema digestivo

Cuando estamos estresados nuestro hígado produce más azúcar (glucosa) de lo normal para obtener energía y que nuestro cuerpo responda.

Cuando nuestro cuerpo ya tiene un estrés prolongado y crónico es posible que nuestro cuerpo no sea capaz de asimilar toda la glucosa de nuestro organismo. Podrá aumentar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

Entre unas de las sintomatologías que puede presentar la presencia de una elevada glucosa puede ser acidez o reflujo ácido gracias al aumento del ácido estomacal. El estrés puede afectar a la circulación de los alimentos dentro del organismo, provocando un posible estreñimiento o diarrea, además puedes presentar náuseas, vómitos e incluso dolor de estómago.

Sistema muscular y el estrés en el cuerpo

Cuando estamos estresados nuestros músculos se protegen de las lesiones posibles, estos tienden a liberarse una vez que se relajan. Cuando es un estrés constante los músculos se quedan tensos, provocando dolor de cabeza, espalda y de hombros. El dolor corporal en alto nivel nos induce a consumir analgésicos lo cual no es tan recomendable.

Sistema reproductivo

Cuando un hombre se encuentra estresado suele perder el deseo sexual, ya que, como mencionábamos anteriormente. El estrés está directamente asociado a la mente, además puede reducir los niveles de testosterona a largo plazo cuando se trata de un estrés crónico.

En el caso de las mujeres, el estrés puede afectar el ciclo menstrual, así como puede afectar periodos irregulares, más abundantes o incluso más dolorosos. Además, el estrés crónico también puede aumentar los síntomas de la menopausia.